Cuando estás escribiendo un documento, es muy importante guardar los cambios que realices cada cierto tiempo, con ello te aseguras de que un fallo del sistema o corte de suministro energético no tire por tierra el trabajo que tanto te ha costado realizar. Si quieres hacer esto en los documentos de texto que crees con Word 2007, solo tienes que pulsar sobre el botón de Microsoft Office y, después, en Opciones de Word.
Aparecerá una nueva ventana donde has de acudir a Avanzadas, lo que te llevará a una opción con muchos apartados. En concreto, te interesa localizar el que se llama Guardar y, para llegar hasta él, haz scroll hacia abajo en esta ventana. En este lugar, has de marcar con un aspa las opciones Crear siempre copia de seguridad y Permitir guardar en segundo plano, para aumentar la seguridad de las copias. Cierra la ventana pulsando en Aceptar.
Con ello, los cambios se guardarán automáticamente y se creará un documento de copia de seguridad. Este tendrá el mismo nombre que el documento de Word con el que estas trabajando, pero su extensión será WBK. Esta copia se guarda en el mismo lugar que el archivo que estás modificando y puedes abrirla pulsando en el botón de Microsoft Office/Abrir y seleccionado el archivo en cuestión. Para recuperarla, pulsa en el botón de Microsoft Office y, después, en Guardar como, dándole otro nombre.
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